La poeta peruana Blanca Varela falleció a los 82 años de edad, informaron medios de información del país.
La artista fue galardonada con los premios más importantes de la poesía en español, como el Octavio Paz de Poesía y Ensayo (2001), el Federico García Lorca (2006)y el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2007).
Se inició en la poesía en la Universidad de San Marcos, donde ingresó en 1943 para estudiar Letras y Educación.
A partir de 1947 empezó a colaborar en la revista "Las Moradas", que dirigía Emilio Westphalen. En 1949 llegó a París, donde entraría en contacto con la vida artística y literaria del momento de la mano de Octavio Paz, una figura determinante en su carrera literaria, que la conectaría con el círculo de intelectuales latinoamericanos y españoles radicados en Francia.
De esta etapa data su amistad con Sartre, Simone de Beauvoir, Michaux, Giacometti, Léger, Tamayo y Martínez Rivas, entre otros.
Después de su larga temporada en París, Varela vivió en Florencia y luego en Washington, ciudades donde se dedicó a hacer traducciones y eventuales trabajos periodísticos.
En 1959 publicó su primer libro "Este puerto existe", en 1963 "Luz de día" y en 1971 "Valses y otras confesiones"; Más tarde, en 1978, realizó su primera recopilación fundamental con su escritura "Canto villano".
Finalmente apareció su antología de 1949 a 1998 con el título "Como Dios en la nada". (Fuente: Andina)
Aquí un poema a modo de Homenaje:
CANTO VILLANO
y de pronto la vida
en mi plato de pobre
un magro trozo de celeste cerdo
aquí en mi plato
observarme
observarte
o matar una mosca sin malicia
aniquilar la luz
o hacerla
hacerla
como quien abre los ojos y elige
un cielo rebosante
en el plato vacío
rubens cebollas lágrimas
más rubens más cebollas
más lágrimas
tantas historias
negros indigeribles milagros
y la estrella de oriente
emparedada
y el hueso del amor
tan roído y tan duro
brillando en otro plato
este hambre propio
existe
es la gana del alma
que es el cuerpo
es la rosa de grasa
que envejece
en su cielo de carne
mea culpa ojo turbio
mea culpa negro bocado
mea culpa divina náusea
no hay otro aquí
en este plato vacío
sino yo
devorando mis ojos
y los tuyos
Leer más poemas aquí, y aquí.
La artista fue galardonada con los premios más importantes de la poesía en español, como el Octavio Paz de Poesía y Ensayo (2001), el Federico García Lorca (2006)y el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2007).
Se inició en la poesía en la Universidad de San Marcos, donde ingresó en 1943 para estudiar Letras y Educación.
A partir de 1947 empezó a colaborar en la revista "Las Moradas", que dirigía Emilio Westphalen. En 1949 llegó a París, donde entraría en contacto con la vida artística y literaria del momento de la mano de Octavio Paz, una figura determinante en su carrera literaria, que la conectaría con el círculo de intelectuales latinoamericanos y españoles radicados en Francia.
De esta etapa data su amistad con Sartre, Simone de Beauvoir, Michaux, Giacometti, Léger, Tamayo y Martínez Rivas, entre otros.
Después de su larga temporada en París, Varela vivió en Florencia y luego en Washington, ciudades donde se dedicó a hacer traducciones y eventuales trabajos periodísticos.
En 1959 publicó su primer libro "Este puerto existe", en 1963 "Luz de día" y en 1971 "Valses y otras confesiones"; Más tarde, en 1978, realizó su primera recopilación fundamental con su escritura "Canto villano".
Finalmente apareció su antología de 1949 a 1998 con el título "Como Dios en la nada". (Fuente: Andina)
Aquí un poema a modo de Homenaje:
CANTO VILLANO
y de pronto la vida
en mi plato de pobre
un magro trozo de celeste cerdo
aquí en mi plato
observarme
observarte
o matar una mosca sin malicia
aniquilar la luz
o hacerla
hacerla
como quien abre los ojos y elige
un cielo rebosante
en el plato vacío
rubens cebollas lágrimas
más rubens más cebollas
más lágrimas
tantas historias
negros indigeribles milagros
y la estrella de oriente
emparedada
y el hueso del amor
tan roído y tan duro
brillando en otro plato
este hambre propio
existe
es la gana del alma
que es el cuerpo
es la rosa de grasa
que envejece
en su cielo de carne
mea culpa ojo turbio
mea culpa negro bocado
mea culpa divina náusea
no hay otro aquí
en este plato vacío
sino yo
devorando mis ojos
y los tuyos
Leer más poemas aquí, y aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario