Miguel Arrisbasplata, escritor y docente universitario.
El novelista, narrador y escritor Miguel Arribasplata Cabanilllas (San Pedro-Cajamarca 1951), ha publicado Julián Huanay y la literatura proletaria en el Perú. Se trata de un libro fundamental de un innato narrador taxista.
-¿Cómo Huanay concilió sindicalismo y literatura?
-La época que le tocó vivir a Huanay, exigió a los intelectuales al servicio de las causas proletarias fundirse en la acción y organización sindicalista. Huanay sufrió la represión del gobierno de Odría y fue recluido en El Sexto; ahí escribe y lee más. El compromiso con su clase hace que su vocación se vuelque al servicio del pueblo oprimido.
- ¿Por qué llamas literatura proletaria, cuál es su característica?
-En el Perú surge un tipo de literatura que reflejó las aspiraciones y la vida de la clase obrera; cobró auge en la lucha por las 8 horas de trabajo y por el derecho a organizarse. Es realista, hecha en función de la lucha del proletariado, tiene alto contenido político, clama contra la explotación y la injusticia, posee gran dosis de humanismo, tiene “mensaje”, es clasista, testimonial. Retoño, Suburbios, Tungsteno, son claros exponentes.
-¿Tuvo conflictos con el lenguaje?
-Sí, sobre todo con la gramática; al conocer a su futura esposa, Carmen Iturrizaga, ésta le corrige sus cartas y escritos; decide tener más cuidado con lo que escribe.
-¿Qué significa Huanay para la literatura peruana?
-El aporte al arte humanista, la vivencia y la moral de la clase obrera, con su optimismo socialista, su solidaridad y sus aspiraciones de cambio a través de los héroes anónimos del trabajo y la lucha por la vida.
-¿Qué escribes y qué lees ahora?
-Trabajo como lo hago siempre sacando tiempo al tiempo. Escribo una novela titulada Puñales de Viento, ambientada en Apurímac, como reconocimiento a la Universidad Tecnológica de los Andes y a los hervores tempestuosos que le tocó vivir al poblador de la sierra sur. Leo El pacto con el diablo, de Miguel Gutiérrez: verdadero aprendizaje para escribir y leer como actos de vida. También Retablo de Julián Pérez: renovación y gran acontecimiento novelístico de la literatura ambientada en el mundo andino; es un escritor de grandes universos y voces. También leo a Pamuk y Kertesz. Me gusta la ternura muy peruana de La niña mala, mas no su final.
Fuente: Diario La Primera 02/04/2009
4 comentarios:
Rumimaqui dijo:
Es una pena que algunos destacados escritores como Miguel Arribasplata mantengan viejos prejuicios contra los homosexuales y lesbianas. Seguramente no lo expresa en sus publicaciones pero quienes hemos sido sus alumnos podemos dar fe de su ironía reiterativa contra quienes tienen una opción sexual diferente. Al parecer su formación política marxista (de los años 70s) todavía pesa demasiado. Como profesor podriamos decir que es buen escritor, sin embargo creemos que podría mejorar su didáctica si al menos permitiese que sus alumnos discrepen y piensen de manera diferente, alentándolos a ser cuestionadores y críticos ,no meros oyentes pasivos de sus "interesantes" anécdotas o "víctimas" de su ironía por atreverse a expresar ideas diferentes a los suyas. Más tolerancia no le haria daño por el contrario lo alejaría de esa imagen que proyecta, imagen de escritor provinciano resentido por no ser reconocido por la élite literaria culta de nuestro país.
Tampoco le hace un gran favor andar por el mundo contando a sus alumnos las "cualidades" personales, académicas y profesionales de sus compañeros de trabajo y oficio. La discreción todavía es bien considerada por muchos.
Finalmente tendríamos que referirnos a su inmodestía, siempre será preferible que sean los otros quienes se refieran en términos aprobatorios a nuestras cualidades y no tener que recurrir al ridículo de estar autoelogiándonos. El autobombo nunca producirá respeto o admiración por el contrario siempre provocará vergüenza ajena.
No tenemos que ser tan duros con el escritor Miguel Arribasplata, tengamos en cuenta que la mayoría de nuestros escritores son algo excéntricos, bohemios y harto acomplejados.
No entendemos si es por tradición, moda o deseo de figuración pero el hecho es que son así la mayoría de nuestros escritores. Después de todo quién no tiene de loco (o loquito) un poco.
Estoy de acuerdo con el comentario de Rumimaqui, en todo. Yo tambien conoci a este escritor, que trabajó como profesor y sigue trabajando como tal. Trató de hacer mucho daño a sus alumnos, digo trató, porque más daño se hizo él, cuando huyó de una universidad del Perú por un escándalo que él había originado. Pienso también que él no es una persona mala, a pesar de todo, sino una persona cargada de mucho dolor. Ojalá que con el tiempo cambie su actitud, para el bien de él mas que todo.
todas las obras del exitoso novelista Miguel Arribasplata hancido un exito ya que son bonitas y de prestigio, se que tuvo algunos obstàculos en la vida pero los superò,deseo muchos èxitos en su vida y que siga siendo un buèn escritor y mucha suerte.
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