Nacido en Piura en 1940, Gutiérrez se ha convertido en uno de los novelistas más leídos y comentados del Pero. Hizo sus estudios en el colegio Salesiano de su ciudad natal y posteriormente ingresó a la Universidad Católica (1957) y luego pasó a la Universidad de San Marcos donde concluyó la especialidad de literatura en la Facultad de Letras (1967). Profesor de la Universidad de Huamanga (1968/1969), ha profesado también en la Universidad de San Marcos (1974). Posteriormente ha sido profesor por varios años en la Universidad Enrique Guzmán y Valle, La Cantuta y ha residido en China, trabajando como corrector de estilo en diferentes publicaciones en español. Actualmente está consagrado exclusivamente a la literatura. Ha publicado las siguientes novelas:
El viejo saurio se retira (1969), Hombres de caminos (1968), La violencia del tiempo (1991), La destrucción del reino (1992), Babel, el paraíso (1993), Poderes secretos (1995) y El mundo sin Xochitl (2001).
El viejo saurio se retira (1969), Hombres de caminos (1968), La violencia del tiempo (1991), La destrucción del reino (1992), Babel, el paraíso (1993), Poderes secretos (1995) y El mundo sin Xochitl (2001).
También es autor de libros de ensayos, entre ellos:
La generación del 50: un mundo dividido (1988) y Celebración de la novela. Cuando apareció la primera novela de Gutiérrez pocos advirtieron que ese texto abría una verdadera caja de Pandora, el territorio favorito de un novelista de garra lleno de conflictos y de afectos.
La generación del 50: un mundo dividido (1988) y Celebración de la novela. Cuando apareció la primera novela de Gutiérrez pocos advirtieron que ese texto abría una verdadera caja de Pandora, el territorio favorito de un novelista de garra lleno de conflictos y de afectos.
El viejo saurio se retira es una novela de aprendizaje en el sentido que lo son las novelas de James Joyce Retrato del artista adolescente o de Dylan Thomas Retrato del artista cachorro. Pero más que a esos dos textos, el de Gutiérrez tiene semejanza con El estudiante Torless de Robert Musil. Se trata de un conjunto de jóvenes que en una difícil maduración se enfrentan a la omnímoda religiosidad de un colegio católico en Piura. Un crítico, José Miguel Oviedo, advirtió en el momento de la aparición del libro, que había elementos comunes con la novela picaresca. Sin duda, literalmente tenía razón, pero los otros valores de la novela no fueron cabalmente percibidos. Gutiérrez traía ya en ese primer libro, una prosa diferente, nerviosa, variada, de intensidad lírica, precisamente como había sido la prosa del primer Dos Passos en los años veinte de la centuria pasada. Gutiérrez demoró bastante en entregar una segunda novela. Entretanto fundó la revista Narración en 1966 con otros escritores como Oswald Reynoso, Juan Morillo, Gregorio Martínez, Augusto Higa.
Podría decirse que la crítica peruana no se percató en los años setenta, que estaba apareciendo un novelista original. Pero cuando se publicó Hombres de caminos en 1988, ya hubo cierto consenso. Gutiérrez volvía a ocuparse de Piura, pero esta vez salía de los muros escolares y mezclaba su pluma con las clases populares, con la variedad de conflictos de campesinos con patrones, generalmente edulcorados por los escritores regionales o aparentemente olvidados en la memoria de la gente. Esa temática de Hombres de caminos será desarrollada con más vigor en La violencia del tiempo, para muchos, la novela más interesante de Gutiérrez.
Al iniciarse los años noventa del pasado siglo ya Gutiérrez es un novelista cuajado, dueño de sus recursos expresivos y puede, mediante los artilugios de un gran creador, mezclar acontecimientos de su espacio favorito, Piura, con otros conocidos por él mediante el estudio y la información como la Comuna de París de 1870.
En La destrucción del reino vuelve Gutiérrez a esos espacios piuranos, llenos de polvo, sol y conflicto. Una pizca de nostalgia tiñe su prosa vigorosa. Babel, el paraíso, una novela muy bien lograda de Gutiérrez y no suficientemente celebrada por la crítica nacional, se ambienta en oriente, podríamos decir que en China, aunque la obra no es suficientemente explícita en ese punto. Con páginas de prosa impecable, el tema de fondo, es la metafísica del poder. Gutiérrez ha sabido trasminar su experiencia en China, el conocimiento, aunque fuere indirecto de los mecanismos del poder en una sociedad cerrada, a una parábola sobre la condición humana. Simultáneamente Gutiérrez explora la esfera de los afectos entre personas de diferentes culturas.
El mundo sin Xochitl, vuelve a los espacios de Piura. Novela de gran belleza, acabada, de gran fuerza y perfección formal. Esta vez se nos presenta una Piura en algunos aspectos misteriosa. Gutiérrez se atreve con un tema sombrío: el incesto entre hermanos y lo hace con delicadeza casi religiosa. Y el pecado, como en otras grandes novelas, se asocia a enfermedad y muerte. Al final de la novela, como en Los ríos profundos de José María Arguedas, una epidemia de peste, invade la comarca. Puesto que está en plena madurez, Gutiérrez todavía nos puede ofrecer otros logros.
Obra
Novelas
El viejo saurio se retira (1969)
Hombres de caminos (1988)
La violencia del tiempo (1991)
La destrucción de reino (1992)
Bable el paraíso (1993)
Poderes secretos (1995)
El mundo sin Xóchitl (2001)
Obra
Novelas
El viejo saurio se retira (1969)
Hombres de caminos (1988)
La violencia del tiempo (1991)
La destrucción de reino (1992)
Bable el paraíso (1993)
Poderes secretos (1995)
El mundo sin Xóchitl (2001)
Confesiones de Tamara Fiol (2009)
Ensayos
La generación del 50: Un mundo dividido (1988)
Celebración de la novela (1996)
Los andes en la novela peruana actual (1999)
La novela en dos textos (2002)
No hay comentarios:
Publicar un comentario